Qué es una conexión SlimPort y para qué sirve

Conectar un teléfono móvil a una pantalla grande es una realidad desde que existe DisplayPort. Se trata de una interfaz de vídeo desarrollada por la VESA, y se utiliza para conectar una fuente de vídeo a una pantalla. También se puede utilizar para llevar archivos de sonido, como USB y como otras formas de transmisión de datos. Se puede utilizar para transmitir audio y vídeo de forma simultánea, aunque también se pueden enviar de forma separada. Una de las aplicaciones surgidas al calor de DisplayPort y que está bastante extendida es la que conocemos como SlimPort, que cada vez está más presente en más teléfonos Android actuales.

Si tienes pensado comprar uno de estos dispositivos con soporte SlimPort pero no tienes muy claro lo que es, entonces sigue adelante porque este artículo es para ti. Vamos a contarte todo lo que necesitas saber sobre este tipo de conector para que no te quede ninguna duda.

¿Qué es SlimPort? ¿Cómo funciona?

SlimPort es un desarrollo de la empresa Analogix que permite obtener una salida de vídeo con calidad HD desde el puerto USB. Lleva disponible desde 2012 aproximadamente y comparte alguna similitud con soluciones como MHL, si bien sus diferencias pueden considerarse como mucho mayores a la hora de compararlos.

Como íbamos diciendo, al tratarse de una conexión de vídeo directa, SlimPort permite diferentes salidas desde la misma conexión. En concreto puedes utilizar varios adaptadores, desde Micro-USB a DisplayPort, HDMI, DVI o VGA, aunque hay que tener algo en cuenta: no todas se conectan igual al dispositivo de entrada, pero todas funcionan directamente sin necesidad de nada extra.

Entre sus características podemos destacar una compatibilidad directa con DisplayPort y la posibilidad de cargar el terminal móvil mientras se utiliza —aunque no siempre vamos a disponer de esta característica por cómo funcionan las señales de vídeo digitales—.

Para utilizarlo lo único que tenemos que hacer es conectar el adaptador SlimPort al teléfono, después conectarlo mediante el cable correspondiente al monitor en el que vamos a reproducir nuestro terminal y ya está, ya podemos reproducir contenido de nuestro terminal móvil en cualquier pantalla.

Las novedades de Slimport frente a otras conexiones

Ya hemos hablado antes de alguna de las bondades de SlimPort, como por ejemplo la posibilidad de que el terminal móvil reciba carga, pero también hemos comentado que esto no va a ser siempre así. Otra característica es que se trata de una tecnología de tipo OEM, por lo que cualquier fabricante debería poder usarlo sin restricciones.

Otra característica importante a tener en cuenta es el alto grado de compatibilidad de SlimPort frente a sus rivales. Se dispone de manera directa de varios adaptadores, con lo que no es necesario ningún transformador para convertir el vídeo a distintas señales.

Por último, vale la pena señalar que SlimPort usa toda la resolución del smartphone o la tablet, mientras que la mayoría de dispositivos todavía están poniéndose al día para poder recibir señales de vídeo de resoluciones muy altas —aunque MHL, por su parte, sí admite resoluciones 2K—.

Ventajas e inconvenientes del protocolo

La mayoría de ventajas del protocolo ya las hemos enumerado: conexión directa de vídeo, aprovechamiento de toda la resolución del smartphone o la tablet, posibilidad de cargar el terminal mientras se usa y un alto grado de compatibilidad. Ahora bien, el dispositivo también tiene una serie de inconvenientes a tener en cuenta.

El primero es que se trata de una conexión directa cableada. Hoy en día muchos sistemas de transmisión de vídeo desde un smartphone o una tablet confían en tecnologías inalámbricas —ahí tenemos a Chromecast, por ejemplo—, pero lo cierto es que actualmente todavía no podemos saber al 100% si un emisor y un receptor se van a entender al 100%. Aún así, muchos van a optar siempre por las conexiones sin cables en primer lugar. No obstante, en el siguiente vídeo se puede ver SlimPort demostrando un rendimiento mucho mejor al del Chromecast.

El segundo es que no está tan extendido como MHL y la gran mayoría de dispositivos que lo soportan son fundamentalmente de la firma coreana LG, si bien el rango se ha ampliado un poco con el tiempo. SlimPort llegó un poco tarde a la fiesta de dispositivos de transmisión de vídeo, y tuvo que conformarse con lo que pudo a pesar de que funciona mejor que MHL en la mayoría de ocasiones.

Como último inconveniente podemos citar el elevado precio de los cables. Mientras que los cables MHL cuestan entre 10 y 15 euros, el precio de los SlimPort sube a los 35 o 40 euros.

¿Qué dispositivos son compatibles con SlimPort?

Si te interesa comprar un dispositivo compatible con SlimPort para poder reproducir contenidos de tu terminal en tu televisor, entonces te conviene echarle un vistazo a esta tabla: