Que se moje tu móvil puede ser un problema, especialmente si no cuenta con la protección IP correspondiente. Ahora bien, el hecho de que se haya sumergido en una masa de agua o haya quedado empapado por la lluvia no quiere decir que vaya a dejar de funcionar para siempre. ¡Todavía hay posibilidades de recuperarlo!
En este artículo te explicamos qué debes hacer y qué no debes hacer cuando tu móvil se moja. Te mostramos los consejos más prácticos, por orden, para que los sigas inmediatamente después de que tu teléfono se haya sumergido en un líquido. Al final de la guía, encontrarás cuatro errores que debes evitar si no quieres perder tu dispositivo para siempre.
Qué hacer si se te ha mojado el móvil: trucos que funcionan
Empecemos hablando de los pasos que debes seguir si tu móvil se ha mojado. Al poner en práctica estos procedimientos, aumentan notablemente las posibilidades de que el dispositivo vuelva a la vida.
Saca el móvil del agua lo antes posible
Cuando tu teléfono móvil se moje, es fundamental actuar con rapidez. Como no podía ser de otro modo, el primer paso es sacarlo del agua lo más pronto posible. Piensa que cada segundo que pasa, más agua entrará en el interior del dispositivo, aumentando a medida que pasa el tiempo el riesgo de daños irreversibles.
Aunque hablaremos de esto más adelante, debemos mencionarlo aquí también. Ten mucho cuidado al sacarlo del agua para no presionar ningún botón. Tampoco debes intentar encenderlo porque provocarás un cortocircuito. Entonces, ¿qué pasos debes seguir a continuación? Sigue leyendo.
Quita la batería, la SIM y la microSD
Ahora ya has sacado el móvil del agua. Lo que debes hacer a continuación es quitar la batería, si es posible, extraer la SIM y cualquier otro elemento desmontable, como la bandeja de la tarjeta de memoria. Es crucial que lo hagas porque son componentes que pueden retener agua, provocando más daño del que ha causado ya el agua. Además, desconectar la batería evitará que se quemen otras partes del dispositivo, como la placa base.
Cuando tengas en la mano la SIM o la tarjeta de memoria, coge una toalla o una servilleta y aplica un secado cuidadoso.
Elimina cualquier resto de agua
Ha llegado el momento de eliminar cualquier resto de agua o líquido que pueda estar presente en el teléfono. Lo mejor es que emplees un pañuelo de papel absorbente o una toalla suave. Céntrate, sobre todo, en las ranuras, puertos y aberturas donde el agua podría haberse acumulado. Esto incluye la zona del altavoz o el jack de 3.5 mm de los auriculares. Deja el móvil colocado de tal manera que siga saliendo agua de su interior y repite el proceso de secado cuando aparezcan más restos del líquido.
También puedes colocar el dispositivo ante una corriente de aire frío de baja potencia, como la que puedes lograr con un secador. Pero ten mucho cuidado de que no llegue hasta el dispositivo aire caliente, ya que esto genera más daños.
Sumerge el móvil en arroz, arena o material secante
El arroz es un aliado a la hora de eliminar la humedad, pero debe cubrir el móvil por completo
Este es un consejo que, contra todo pronóstico, es muy efectivo. Nos referimos a sumergir el móvil en un material secante como arroz, arena o un producto específico para absorber la humedad. Hablamos de productos que ayudan a extraer la humedad restante del dispositivo. ¿Cómo lo puedes hacer?
Es muy fácil:
- Llena un recipiente con el producto en cuestión, por ejemplo, con arroz.
- Coloca el teléfono en el interior.
- Asegúrate de que esté completamente cubierto, pero ten cuidado con que no entre material en las ranuras.
- Deja el móvil sumergido en el recipiente durante al menos 24 horas o más, preferiblemente en un lugar seco y cálido.
Es importante que seas paciente porque, si aún queda agua en el interior y tratas de encender el dispositivo, provocarás un daño irreversible. Recuerda que, cuanto más tiempo pase el móvil recubierto de arroz u otro material antihumedad, mayores serán las posibilidades de recuperarlo.
Prueba con el método del alcohol
¿En qué consiste el método del alcohol? Básicamente, funciona sumergiendo el teléfono en alcohol isopropílico de alta concentración. Aunque parece agua, en realidad este producto ayuda a evaporar la humedad interna más rápidamente y disuelve los posibles residuos que puedan haber quedado.
Esto es lo que debes hacer para que funcione:
- Llena un recipiente con suficiente alcohol isopropílico para cubrir el teléfono.
- Sumerge el teléfono durante unos minutos y luego retíralo.
- Déjalo secar al aire durante un tiempo suficiente.
- Asegúrate de que el teléfono esté completamente seco antes de encenderlo.
- Si no es así, repite el proceso.
Este producto se evapora sin dejar rastro, al tiempo que se lleva consigo el agua y la humedad.
Mete el móvil en una bolsa con bolitas antihumedad
Otra opción que hay en el mercado son las bolitas antihumedad. Como en el resto de los casos, basta con situar el teléfono en una bolsa de plástico hermética. Introduce junto a él varias bolsas de bolitas antihumedad y sella la bolsa. Deja el teléfono en este estado durante al menos 24 horas antes de volver a probar su funcionamiento. De nuevo, es imprescindible ser paciente y extender el tiempo de secado cuanto sea posible.
Enciende el móvil tras 24 horas de secado y prueba suerte
¿Has seguido los pasos mencionados aquí? Entonces, ha llegado el momento de encender el terminal y probar suerte. Hazlo únicamente si has esperado al menos 24 horas al seguir los procedimientos que así lo requieren.
Ten en cuenta que, incluso si consigues encender el teléfono, es posible que algunos componentes estén dañados. Por ejemplo, quizá puedes hacer llamadas con normalidad, pero la cámara frontal no está disponible. No te queda otra que aprender a convivir con estos inconvenientes o cambiar de teléfono. Los daños por agua no están cubiertos por la garantía del fabricante.
Qué NO hacer si se te ha mojado el móvil: acciones a evitar
Hay algunas cosas que NO deberías hacer bajo ningún concepto. Hablamos de acciones que podrían dañar definitivamente el dispositivo y hacer que no vuelva a funcionar nunca más. Si no quieres comprar un móvil nuevo, evita a toda costa lo que aquí mencionamos.
No enciendas el móvil de inmediato
Evita a toda costa encender el dispositivo si lo acabas de sacar del agua
Uno de los errores más comunes es encender el teléfono de inmediato después de haberlo sacado del agua. Si aún está húmedo, esta acción tan simple provocará cortocircuitos y dañará permanentemente los componentes internos. Antes de ponerlo en marcha, sigue las instrucciones citadas en el párrafo anterior.
No sacudas ni agites el teléfono
Agitar el teléfono para intentar eliminar el agua atrapada quizá tenga graves consecuencias. Aunque creas que vas a extraer la humedad haciendo esto, lo habitual es que la termines extendiendo por todos los componentes del dispositivo, provocando daños aún mayores. Cuando un teléfono se moja, ser paciente y evitar acciones bruscas es básico para tratar de recuperarlo.
No intentes secar el móvil soplando
Secar el móvil soplando por las ranuras tampoco es aconsejable. En primer lugar, la corriente de aire que generas con la boca no va a ser suficiente para eliminar el agua que se ha acumulado entre los componentes del dispositivo. Pero, además, el aire que exhalas contiene humedad. Teniendo esto en cuenta, lo que vas a hacer en realidad es agravar la situación.
No uses secadoras, hornos u otras fuentes de calor
¡Aleja tu móvil de cualquier fuente de calor! Evita el uso de secadores de pelo para crear corrientes de aire caliente, no sitúes el móvil en el horno y no aproveches otras fuentes de calor para intentar secar un teléfono mojado.
Este no es un tema que puedas tomarte a la ligera. De hecho, la exposición directa a altas temperaturas puede derretir plásticos, dañar las pantallas y provocar deformaciones en la estructura del teléfono.
