Muchos dicen que el anonimato en internet tiene los días contados. En realidad, por mucho nick y avatar que utilicemos, nadie es ya completamente anónimo en la Red. Es bastante sencillo rastrear a un usuario online para conocer su identidad real, algo que hacen con frecuencia los cuerpos de seguridad en caso de delito. Los profesionales de RRHH saben también muy bien lo fácil que es identificar y acceder a una enorme cantidad de información personal de casi cualquier candidato gracias a lo que ha ido publicando en internet. No obstante, existen aún diversos métodos para mantener nuestro anonimato -y salvaguardar nuestra privacidad- cuando navegamos o participamos en comunidades y plataformas online. Repasamos aquí algunos de ellos.
Navegador Tor
La forma más radical de garantizar nuestra privacidad en internet es pasarnos al navegador Tor. La red Tor, distribuida por todo el planeta, redirige el tráfico web por múltiples servidores y hace que las direcciones IP sean anónimas. Además de facilitar el acceso a sitios que estén bloqueados (por ejemplo, en determinados países) y a la deep web, Tor protege nuestras comunicaciones y evita que otra persona pueda saber qué sitios visitamos o cuál es nuestra ubicación física. El navegador Tor, preconfigurado para mantener el anonimato, puede utilizarse tanto en Windows como en MacOS o GNU/Linux.
Para que el navegador Tor funcione a la perfección, sus creadores te aconsejan que no habilites ni instales plugins, ya que pueden revelar tu dirección IP. Además, aunque utilices Tor, es también aconsejable que optes por las versiones seguras https de los sitios web (Tor cifra todo tu tráfico desde y dentro de la red Tor, pero el cifrado de tu tráfico hasta el sitio web depende de ese sitio).
Configura la privacidad de tu navegador
Si no quieres dejar de utilizar tu navegador habitual, como Chrome o Firefox, también puedes realizar algunos pequeños ajustes para mejorar su privacidad. El objetivo es reducir la cantidad de información que recoge tu navegador: el autocompletar de los formularios, el almacenamiento automático de contraseñas, los datos de navegación o, por supuesto, las cookies.
En Chrome (Configuración > Configuración avanzada > Privacidad y seguridad), puedes enviar una solicitud de no seguimiento de tu tráfico de navegación, y también controlar la información sobre ti que pueden utilizar los sitios web y el contenido que pueden mostrarte. Firefox, por defecto, garantiza ya la protección y privacidad de tus datos 24x7 para que no te rastreen las marcas.
Ventana de incógnito
Los navegadores convencionales también te permiten utilizar un “modo incógnito”. Cuando navegues en privado, otros usuarios que utilicen el dispositivo no podrán ver tu actividad, ya que no se guardará ni el historial de navegación ni la información introducida en los formularios. Para abrir una pestaña privada en Chrome, debes ir al menú de los tres puntitos en la esquina superior derecha y seleccionar “Nueva ventana de incognito”. También puedes utilizar esta combinación de teclas: Ctrl + Mayús + N.