¿Compartes tu ordenador con otras personas y te gustaría que cada uno tuviese su propio espacio asignado? Con este sencillo truco es muy fácil hacerlo, y evitar que un usuario acapare más gigabytes de la cuenta.
Las últimas versiones de Windows incluyen una interesante opción para asignar cuotas de uso del disco duro y limitar la cantidad de la que dispone por defecto cada usuario. Para acceder a ella, basta con hacer clic derecho sobre la unidad de almacenamiento (por ejemplo, C:), entrar en Propiedades y buscar la pestaña Cuota.
Al pulsar sobre Mostrar configuración de cuota, accederás al panel que te permitirá asignar cuotas de disco por usuario. En primer lugar, marca la casilla “Habilitar la administración de cuota”, y a partir de ahí escoge las opciones que más interesantes te resulten (por ejemplo, emitir avisos al superar un determinado espacio o directamente denegar la escritura una vez superado el umbral determinado).
Una vez estés listo para continuar, entra en “Valores de cuota” y en el menú Cuota>Nueva entrada de cuota podrás indicar el usuario al que acotar el espacio. Luego selecciónalo, haz clic derecho sobre él y ya habrá llegado el momento de indicar el límite o las advertencias que le afectarán. Fácil y eficaz.
Por supuesto, siempre que lo desees podrás revertir esta situación y desactivar la administración de cuota.